Queridos compañeros y amigos:
Cuando en diciembre de 2019 se identificaron en Wuhan (Hubei, China) los primeros casos de lo que luego se conocería como enfermedad COVID-19, el programa científico de nuestro 35 Congreso Nacional SERAM a celebrar en Zaragoza, estaba prácticamente concluido, el proceso de acreditación en marcha y toda la infraestructura logística preparada. El crecimiento explosivo del número de casos llevó a la OMS a la declaración de pandemia el 11 de marzo, cuando el virus estaba probablemente más extendido de lo que entonces se creyó.
El resto es historia, pero nuestra historia, la del Comité Científico del 35 Congreso SERAM, es que, el mismo virus que enfermaba al mundo y confinaba nuestro país, como efecto colateral, hacía también saltar por los aires muchas horas de trabajo y toda la ilusión invertida en el congreso. El estado de alarma hizo inviables las fechas previstas, del 21 al 23 de mayo, y todo era incertidumbre, en relación con una pandemia imparable, que no parecía remitir nunca. No obstante, como todos, volcados en un trabajo asistencial con matices angustiosos y en un aprendizaje y documentación obsesivos sobre una enfermedad de la que desconocíamos casi todo, el congreso había pasado lógicamente a un segundo plano.
La Junta Directiva SERAM/Comité Organizador, decidió en reunión del 19 de mayo 2020, retrasar el 35 Congreso a mayo de 2021, con el encargo para el Comité Científico de establecer las modificaciones necesarias en el programa que permitiesen la celebración del congreso en forma virtual, en caso de que la evolución de la pandemia hiciese inviable su celebración presencial. La tarea para el Comité Científico era difícil e ingrata, al ser imprescindible una drástica reducción de los contenidos científicos programados, tanto si era viable la opción presencial, debido a la previsible restricción de aforo, como si había que optar por el formato virtual, por la limitación de días y horas de emisión.
Finalmente, en octubre pasado, el CO/JD decidió que el 35 Congreso SERAM se celebraría definitivamente en modo virtual, entre los días 19 y 26 de mayo de 2021, con el simposio SERAM/RSNA los días 17 y 18. Para entonces, el Comité Científico ya había avanzado su labor, de forma que el nuevo programa está ya muy adelantado. Para todos ellos mi agradecimiento, al igual que para ponentes, moderadores y participantes a cualquier nivel, que han aceptado los inconvenientes derivados de las restricciones en el programa, cambios de fecha, de horario y de formato de las presentaciones, que están teniendo que soportar para que el 35 Congreso SERAM pueda ser viable.
El rediseño realizado en el programa conserva básicamente los objetivos iniciales, combinando polivalencia en unos aspectos y profundidad especializada en otros. Se mantiene el Simposio SERAM/RSNA precongreso dedicado a “Errores, seudolesiones y variantes normales en Radiología e Imagen diagnóstica”. Parecía obligado incluir una sesión monográfica sobre COVID-19 donde todos los radiólogos pudiésemos compartir nuestra experiencia sobre esta nueva plaga. Para el resto de los espacios disponibles, se han priorizado las sesiones “transversales”, en las que interviene más de un área de conocimiento. Con todo ello, han sido pocos los espacios específicos que han quedado para cada una de estas áreas, aunque todas están representadas en el programa, según frecuentación en congresos previos. El formato virtual limitará el contacto personal, pero no habrá de impedir que los radiólogos podamos compartir conocimiento con eficacia igual o superior al modelo presencial, como parece avalar la experiencia que se va adquiriendo. No obstante, hubiera sido deseo de todos nosotros realizar un congreso de gran calado científico, en un contexto de calor humano, con la tierra aragonesa como anfitriona. Espero que podamos resarcirnos en el Congreso de Málaga, para el que deseo una singladura más tranquila.
Nunca dudé de la viabilidad del 35 Congreso, aunque alguna vez pude tener motivo. No obstante, no hubiera sido posible sin el empeño, desde el primer momento, de la Junta Directiva SERAM /Comité Organizador y, desde luego, sin el apoyo incansable de la Secretaría Técnica, cuya paciencia y dedicación han sido admirables en todo momento. Quiero agradecer también a la industria, que siempre está ahí, y a todo aquel que en algún momento hizo algo para que el 35 Congreso SERAM siguiese adelante.
Termino con un mensaje para todos los radiólogos y profesionales vinculados con la Radiología en España y, por qué no, en el resto del mundo.
¡Hasta mayo amigos, os esperamos en vuestras casas!
José M. Artigas Martín Presidente del Comité Científico
35 Congreso Nacional SERAM